Hace un año, la firma del documento sobre la hermandad humana

Última modificación: jue 31 mar 2022 p.Â m. p.Â m.28 16:13

El 4 de febrero de 2019, el Papa Francisco y el Gran Imán de Al-Azhar firmaron la Declaración de Abu Dhabi, una invitación a la reconciliación y la hermandad. Recordemos algunos de los pasos que se han dado desde entonces, siguiendo este documento.

Ha pasado un año desde la firma del histórico "Documento sobre la Fraternidad Humana para la Paz Mundial y la Convivencia Común". La colocación de este hito, que va más allá de la mera relación entre el cristianismo y el Islam, fue realizada el 4 de febrero de 2019 en Abu Dhabi por el Papa Francisco y el Gran Imán de Al-Azhar, Ahmad Al-Tayyib. El texto es una brújula que apunta a la cultura del diálogo, la colaboración común y el conocimiento mutuo. El documento es un llamado a poner fin a las guerras y condena los flagelos del terrorismo y la violencia de inspiración religiosa en particular. "La fe - afirma el prefacio - lleva al creyente a ver en el otro un hermano al que apoyar y amar".

"Un documento razonado con sinceridad y seriedad para ser una declaración común de buena y leal voluntad, destinado a invitar a todos aquellos que llevan en su corazón la fe en Dios y la fe en la fraternidad humana a unirse y trabajar juntos, para que este Documento se convierta en una guía para las nuevas generaciones hacia la cultura del respeto mutuo, en la comprensión de la gran gracia divina que hace a todos los seres humanos hermanos y hermanas. (Documento sobre la fraternidad humana)".

Las religiones son puentes entre los pueblos

Con el fin de promover los ideales de tolerancia y cooperación contenidos en la Declaración de Abu Dhabi, el 20 de agosto se estableció en la capital de los Emiratos Árabes Unidos un Comité para la aplicación del Documento sobre la Hermandad Humana, compuesto por miembros cristianos, musulmanes y judíos. Su tarea consiste en elaborar un marco para el logro de los objetivos del documento, preparar los planes necesarios para su aplicación práctica y vigilar su aplicación en los planos regional e internacional, organizando también reuniones con dirigentes religiosos, dirigentes de organizaciones internacionales y otras personalidades para promover una acción concertada. El Comité se reúne por primera vez en una fecha simbólica, el 11 de septiembre, justo un mes después de su nacimiento, en el Vaticano, en la Casa de Santa Marta. El Papa Francisco dirigió palabras de gratitud y aliento a los miembros del Comité. Los exhortó a ser "artesanos de la fraternidad", para que sean los creadores de una nueva política, "no sólo con la mano extendida, sino con el corazón abierto". Luego, al final de la reunión, según su propia fe, todos rezaron por las víctimas del 11 de septiembre de 2001 y de todos los actos de terrorismo.

Propuesta del Papa y del Gran Imán de Al-Azhar

El pasado mes de diciembre, los miembros del Comité Superior para la Aplicación de los Objetivos contenidos en el Documento sobre la Fraternidad Humana, encabezado por el Cardenal Miguel Ángel Ayuso Guixot, Presidente del Pontificio Consejo para el Diálogo Interreligioso, y por el Juez Muhammad Abd al-Salam, se reunieron en Nueva York con el Secretario General de las Naciones Unidas, António Guterres. Le presentaron un mensaje del Papa y del Gran Imán de Al-Azhar que contenía una propuesta para declarar el 4 de febrero como Día Mundial de la Fraternidad Humana. En respuesta, el Secretario de las Naciones Unidas expresó su reconocimiento y disponibilidad para esta iniciativa.

Conferencia en Abu Dhabi un año después de la Declaración

En vista del primer aniversario de la firma del Documento de Abu Dhabi, el Cardenal Ayuso Guixot recordó la importancia de este Documento: "El texto de la Declaración es cada vez más importante, incluso más allá de las relaciones entre cristianos y musulmanes". Mañana, martes 4 de febrero, en preparación del evento sobre el "Pacto Mundial para la Educación", se celebrará en los Emiratos Árabes Unidos un congreso sobre el Documento de Abu Dhabi, como una nueva oportunidad para continuar el camino trazado por el Papa Francis y el Gran Imán de Al-Azhar.

Amedeo Lomonaco - Ciudad del Vaticano

Origen: Vatican News